21.10.2010 | |||
Paraná también marchó y repudió la muerte de Mariano Ferreyra | |||
Organizaciones sociales, políticas, sindicales y estudiantiles se concentraron este jueves por la tarde en la Plaza 1° de Mayo, frente al monumento del General José de San Martín, para exigir justicia por el asesinato de Mariano Ferreira. Allí se leyó un documento. Participaron alrededor de 200 personas. | |||
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REACCIÓN Repudian crimen de militante del POTras el asesinato del dirigente del Partido Obrero, Mariano Ferreyra, distintas expresiones políticas y sociales de Paraná expresaron su repudio al hecho y su reclamo de Justicia. Divergentes lecturas se hacen del crimen pero se coincide en condenar la violencia que terminó con la vida del joven militante. El Partido Humanista repudió “la violencia en su forma más brutal” y exigió “el esclarecimiento urgente de los hechos”. “Es hora que los violentos se replanteen su propio accionar y se dé, al seno de nuestra sociedad, la necesidad de un amplio debate para erradicar este flagelo que en momentos como éste toma su expresión más grosera y nefasta, pero que convive en los distintos ámbitos a diario generando el caldo de cultivo para que estos episodios, como el asesinato del militante, sucedan”, manifestó la vocera del PH, Bernardita Zalisñak que reconoció que “el gobierno nacional no ha tenido políticas de represión de la protesta social” pero afirmó que “la violencia está instalada y es utilizada por distintos sectores permanentemente”. Proyecto Sur también se expresó ante el hecho y exigió “a la señora presidenta el esclarecimiento del caso que no puede quedar impune”. Ante el contexto político gremial que enmarcó el crimen, la fuerza reclamó “la democratización sindical por ser una demanda justa e imprescindible de todos los trabajadores argentinos” y advirtió que “no se detendrá la violencia gremial mientras continúe el modelo económico y social neoliberal que impone la precarización del trabajo y que exige a la burocracia sindical sostenerse a través de patotas que niegan la expresión de nuevas formas gremiales como las que expresa la CTA”. La Corriente Martín Fierro se ocupó en destacar “el compromiso político de quien fuera asesinado en una manifestación mas allá de cualquier pertenecía política e ideológica”. “El ataque no fue contra una persona, una agrupación o un determinado partido, si no que lo fue contra la democracia y en especial contra el conjunto del pueblo en general y el movimiento obrero en particular”, dijo la agrupación que enfatizó: “No hay explicaciones ni banderas que atenúen el hecho. Como tampoco debe haber titubeos ni mezquindades a la hora de exigir justicia”. Los trabajadores de la Delegación Entre Ríos de la Subsecretaría de Agricultura Familiar de la Nación adhirieron a los actos en repudio al asesinato del joven militante “caído en enfrentamientos estériles provocados por aquellos que en su desmesura, privilegian la muerte y la barbarie por encima del valor supremo de la vida”. Desde la juventud radical de Paraná rechazó “la violencia instalada sistemáticamente por sectores sindicales” e hizo un llamado a “los trabajadores a no amedrentarse por estos hechos ni por los que vendrán que sólo son generados para instalar el miedo en la sociedad y desvirtuar un reclamo por dignidad por un salario justo de un pueblo libre y digno”. “Exigimos un manto de piedad de los sectores que concentran el poder, vemos como se hostiga, persigue, somete al trabajador y su reclamo. Vemos cada día mas trabajo en negro contratos basura, se persigue ideológicamente se los condiciona o excluye por sus ideales al trabajador se le quiere domar su espíritu libre que el trabajo exalta que el trabajador posee”, afirmó la organización que se preguntó “dónde está la democracia”. El dirigente del Partido Comunista y de la Central de Trabajadores Argentinos, Alejandro Milocco, afirmó que “el asesinato de un compañero del campo popular estremece al trabajador de nuestro suelo”. “La respuesta a la solidaria actitud de Mariano Ferreyra de acompañar el reclamo de trabajadores suspendidos por la empresa ferroviaria fue una bala en su pecho. Ese disparo no fue ejecutado esta vez, como tantas, por la fuerza institucional de represión, si no que provino de un lugar que duele más: de una organización sindical, que en vez de tener como objetivo defender a los trabajadores, puso su servicio a defender a los intereses de la empresa que los explota”, denunció Milocco. “Nunca fue comprensible que una fuerza sindical de trabajadores dedique esfuerzos a impedir el desarrollo y la organización de fuerzas hermanas. El límite que impone esta desgraciada muerte es muy rígido y va a ser exigido con fuerza por todas las organizaciones del campo popular”, dijo el dirigente que reclamó el esclarecimiento del hecho “más aún cuando se supo de las reuniones realizadas días previos del secretario general de ferroviarios, José Pedraza, con el candidato del Peronismo Federal, Eduardo Duhalde”. Milocco dijo que “el Gobierno Nacional, si se siente consternado como manifestaron algunos de sus miembros incluida la Presidenta, tendrá que disponer de todos sus esfuerzos para esclarecer este crimen”. Y reclamó a las organizaciones “del campo popular” a que salgan “con más fuerza que nunca y con unidad indiscutible a exigir justicia por esta muerte”. El socialismo de Concepción del Uruguay manifestó su preocupación por el hecho al que consideró como “un vil atropello a la libertad de huelga, lo cual da cuenta del estado crítico en que se ve sumida la clase trabajadora, viéndose obligada a enfrentar diariamente las más injustas reglas de juego que impone el sistema imperante y, al mismo tiempo, arriesgar constantemente la vida frente a la criminalización de la protesta legítima que es amparada, por acción u omisión, desde los más altos cargos del Estado nacional”. “Estamos convencidos de que una sociedad democrática no se logra únicamente por medio de la máscara progresista que pretende hacernos creer que el poder está en manos del pueblo trabajador, al mismo tiempo que se niega deliberada y reiterativamente la libertad sindical y las mínimas seguridades para los trabajadores argentinos”, dijo la fuerza que adhirió a las actividades en repudio al crimen. Juan Domingo Gallo, de la Juventud Peronista Federal, enmarcó el hecho en una serie de muertes ícono de la historia argentina como Santiago Pampillón, Ignacio Rucci, Atilio López, entre otros. En una carta enviada a esta Redacción, destacó que Mariano Ferreyra “era hijo de una docente” y que “era un metalúrgico de profesión, que había hecho un curso en la municipalidad de Avellaneda para tener un oficio”. “La burocracia sindical, y la violencia enquistada en este Gobierno le quito la vida a Mariano, hijo de está democracia que no termina de encontrar su rumbo. Mientras Cristina hablaba de “frutillas grandes” en el twitter, Mariano partía a cada uno de los corazones de los que luchan por esta Patria, y se enraizaba como mártir del movimiento sindical. Su muerte habla, y da la fuerza que genera la bronca y el desprecio; es esa fortaleza que logra que sus compañeros no claudiquen, que no bajen los brazos, que no caigan, y que los derechos laborales no sean letra muerta”, manifestó Gallo que afirmó que “es asesina esta burocracia e hipocresía sindical, que llena estadios de River para decir aquí están los trabajadores, cuando los verdaderos trabajadores están luchando cuerpo a cuerpo, y siendo asesinados por las Patotas de Moyano y Pedraza”. “¿Y ahora que? Estos eran los valientes que vienen a enseñarnos el goce de la ley bajo las banderas del gobierno, estos eran lo que nos iban a enseñar la democracia, estos son los que se jactan de pelear para hacer respetar los Derechos Humanos; este es el Gobierno Peronista. Estos son unos asesinos, que tienen y merecen el repudio de toda la sociedad, y por sobre todo de los trabajadores”, afirmó. De la Redacción de Página Política | ||||
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